Colombiana se fue a trabajar a Ecuador y desapareció en extrañas circunstancias

Con angustia por el paso de los días sin tener razón de ella, la familia de Jéssica Marcela Calvo Montoya la busca en Guayaquil, Ecuador, luego de que supuestamente fuera montada a la fuerza a un carro hace al menos seis días. A ese país suramericano llegó hace cuatro meses para trabajar. 

Aunque Jéssica es de Supía, Caldas, hace varios años su familia reside en la capital antioqueña, desde donde pidieron ayuda a todas las personas que puedan aportarles información sobre el caso.

La mujer tiene una hija de nueve años de edad que vive en el barrio El Pedregal y estaba ahorrando para venir a darle su aguinaldo navideño, según afirmó Jeison Ospina Montoya, primo de ella.  

"Van seis días en que no sabemos de ella, se desapareció. Lo que supuestamente dicen es que vieron que la colombiana salió corriendo, pedir auxilio y la montaron en un carro, ya no se sabe más de ella. Nosotros como pudimos mandamos a mi tía, a la mañana de ella, a Guayaquil, para poder saber qué hacemos porque estamos desesperados", detalló Ospina. 

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A raíz de su extraña desaparición y de no obtener respuestas, según dice la familia, del novio de la mujer, su madre viajó a esa ciudad ecuatoriana para pedir ayuda en el Consulado de Colombia en Ecuador y apoyo de las autoridades, para emprender su búsqueda. El novio habría indicado que a Jéssica se la llevó una banda criminal. 

"El novio tenía el celular, ella aparecía en línea. Él siempre ha tenido el celular y nunca lo quiso entregar, mi tía ya que está allá, que pidió pues ayuda ahí con la Policía, tratando de localizarlo a él, pero se esconde, que se tuvo que ir por amenazas, que lo iban a matar a él también. No quería devolver el celular, ya porque la ley intervino", detalló el familiar. 

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Aunque la madre pudo ir al apartamento donde vivía la colombiana, no encontró mucha información que dé indicios de su paradero. Inicialmente, el compañero sentimental le habría indicado que ella estaba muerta. Ahora, sus familiares esperan que ella aparezca, o al menos su cuerpo, para darle sepultura y acabar con esta zozobra.