Dos colombianos lograron el récord de ir al punto más sur del mundo

"El récord se hizo pero fue algo de oportunidad, yo el año pasado estuve acá presente en esta misma embarcación y a esos lugares que fuimos estaba cubierto de hielo. Entonces la verdad fue un chance, se dio y estuvimos en un lugar porque se estaba haciendo una investigación biológica de pesca con unos italianos y pues en ese momento digamos que estuvimos en el lugar correcto y logramos hacer ese récord".

Estos investigadores abordaron el "Laura Bassi" el pasado 3 de enero y zarparon el 5 del mismo mes de lyttelton (Nueva Zelanda), y permanecieron en la embarcación 2 meses viajando por aguas del este de la Antártica entre el Mar de Ross y áreas aledañas. Finalmente desembarcaron al rededor del 4 de marzo.

Es importante resaltar que la presencia en la Antártida de los connacionales fue gracias a una colaboración entre el Programa Antártico Colombiano (PAC) y el Programa Nacional de Investigación en la Antártida de Italia (PNRA). Esta vendría siendo la novena expedición colombiana.

Según Vallejo, este récord ya lo había logrado una embarcación polaca pero esta expedición logró hacer el desmal un poco menor de la vez anterior y por eso otra vez llegó a ser un récord.

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Al mismo tiempo dio a conocer, cuál fue la misión de los expertos colombianos que estuvieron apoyando dicha travesía.

"El objetivo de nosotros acá como colombianos es la investigación de mamíferos marinos y el monitoreo de ellos. Estuvimos determinando si había algún impacto o perturbación acústica a la que estos mamíferos marinos estuvieran expuestos durante el tiempo que ellos están en Antártida. Hacemos un monitoreo visual directo para el registro e identificación de mamíferos marinos y fauna marina, recolectamos datos de distribución y ecología de especies de mamíferos marinos con el fin de entender su capacidad adaptativa para enfrentar eventos naturales y antropogénicos en corto, mediano y largo plazo, de manera que se pueda establecer y coordinar medidas de manejo y conservación a nivel local, nacional y regional".

La colombiana también le describió a la mesa de trabajo del programa, cómo era el lugar en el que se encontraba en el momento de la entrevista.

"La Antártida son montañas de tierra muy oscura (árida) cubiertas de nieve y se ven témpanos de hielo por todas partes, porque estamos en verano entonces están moviéndose por el agua, también estamos en un rompehielos y nos toca pasar por mucho que se está derritiendo. Está lleno de focas por todas partes. Los icebergs o témpanos de hielo pueden ser tan grandes como un edificio, pueden llegar a tener una altura de  300 pies/100 metros por encima de la superficie del agua, pesar 10 millones de toneladas y tener un anchos 98 pies, parecido a bloques, manzanas o  cuadras de una ciudad ". 

Seguidamente, la bióloga describió a los rompehielos que se ven en este lugar del planeta que, según ella, son inmensas embarcaciones que navegan allí. El “Laura Bassi” es un R/V rompehielos y mide 80 metros de largo y 17 de ancho.

"Un rompehielos es una embarcación que su casco reforzado es capaces de atravesar los duros hielos y tiene una proa muy eficaz con la que romperlos gracias a la gran potencia de sus motores que al empujar consiguen levantar el casco por encima de la superficie, lo cual ejerce una presión sobre la capa de hielo que parte por el peso del barco.

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Finalmente, Ann Carole describió los diferentes mamíferos que logró encontrar en esta desolada región del planeta Tierra.

"En la Artártida de por sí vienen mucho las ballenas a alimentarse ya que es su zona de alimentación, entonces nosotros encontramos las ballenas Jorobadas, las ballenas Minkie, focas como la Leopardo y la Weddell, pingüinos como los Emperadores y Adélie, Esta lleno de especies muy bonitas y uno se llena de emoción cada que los ve".

Durante la presente campaña se registró un total de 190 avistamientos de mamíferos marinos, de los cuales se identificaron nueve especies; cinco especies de cetáceos: ballena piloto de aleta larga (Globicephala melas edwardii), Delfín oscuro o de Fitzroy (Lagenorhynchus obscurus), ballena jorobada/Yubarta (Megaptera novaeangliae australis), ballena Minke antártica (Balaenoptera bonaerensis) y la Orca (Orcinus orca). A su vez se registraron cuatro especies de pinnípedos: Lobo marino de Nueva Zelanda / sureste (lobo marino neozelandes Arctocephalus forsterii), foca cangrejera (Lobodon carcinophagus), foca de weddell (Leptonychotes weddelli) y la foca leopardo (Hydrurga leptonyx)".

Cabe recordar que los técnicos e investigadores que viajaban en la gigantesca embarcación, que participó en la campaña oceanográfica de la 38ª Expedición Italiana del Programa Nacional de Investigación en la Antártida (PNRA), llegaron a territorio “hasta ahora inexplorado” en la Bahía de las Ballenas en el Mar de Ross, en la Antártida.

Los primeros resultados del “estudio de los parámetros físicos del agua de mar (desde la superficie hasta la profundidad próxima al fondo, 216 metros) mostraron la presencia de agua especialmente fría y son de gran importancia para estudiar la dinámica de las corrientes en el Mar de Ross”.

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El viaje del "Laura Bassi" comenzó el pasado 17 de noviembre, cuando partió de Trieste (noreste de Italia) hacia Nueva Zelanda, desde cuyo puerto de Lyttelton partió el pasado 5 de enero rumbo a la estación Mario Zucchelli y el Mar de Ross.

El proyecto “Bioclever” fue coordinado por el Instituto de Ciencias Polares (CNR-Isp) del Consejo Nacional de Investigación italiano, con la colaboración del observatorio marino MORSea (Universidad Parthenope).

“Se dio y estuvimos en este lugar por que se estaba realizando una investigación biológica de pesca llamada Bioclever, liderada por investigadores Italianos. Y la demás información de este proyecto ya la tienes abajo".

El buque "Laura Bassi" llegó a un punto con las coordenadas de 78° 44.280 S en la Bahía de las Ballenas en el Mar de Ross, logrando un nuevo récord que se alcanzó durante la primera campaña oceanográfica, con proyectos como cartografiar los fondos marinos para la creación de mapas de zonas que carecen de ellos, y concluyó con el cambio de personal científico en la estación Mario Zucchelli el 4 de febrero de 2023. 

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