La conmovedora historia del hombre que murió pocas horas después de casarse

La pareja conformada por Michelle White y Scott Plumley decidieron dar el siguiente paso luego de dos años de relación. Los novios se comprometieron en matrimonio y pautaron llegar al altar el pasado 11 de agosto.  

Sin embargo, la ilusión de unir sus vidas bajo la bendición de Dios se opacó cuando dos días antes, Michelle encontró a su futuro esposo en el suelo revolcándose de dolor.  

La mujer de inmediato lo llevó a la emergencia de un hospital en donde los médicos le realizaron una endoscopia ya que Scott manifestaba sentir mucho dolor en su área abdominal.  

Plumley fue diagnosticado con cáncer esófago en etapa 4, y debido a que se descubrió muy tarde la enfermedad, ésta ya se había extendido hasta el hígado destruyéndolo.  

Michelle explicó a los medios locales que los doctores fueron muy sinceros con ella y le aseguraron que a su ‘alma gemela’ solo le quedaban horas de vida. Ante el devastador pronóstico, White hizo lo humanamente posible para casarse antes de que Scott falleciera.  

"Llegamos a la Oficina de Registro en el centro de la ciudad a las 4 p.m. del martes, y conseguimos que la Registradora viniera al hospital al mediodía del miércoles. Literalmente tuve 20 horas para preparar y organizar una boda. Todos fueron muy generosos. Uno de mis amigos hizo las flores, y otro consiguió un pastel. Un vecino me peinó. Todo fue increíble”, aseguró White.  

La ceremonia se realizó en el hospital y Scott fue llevado en su silla de ruedas a la sala donde esperaban los amigos y la familia de la pareja. La radiante novia llegó y su sueño de casarse con el hombre que amaba se hizo realidad.  

A las pocas horas, el estado de Plumley empeoró. "Me senté con él, tomé su mano y él sonrió, y seguía diciendo que lo sentía y que 'te amo'. Lo abracé y lo besé, él soltó tres respiraciones y le dije: 'Está bien bebé sal del dolor'", agregó Michelle.  

A las 13 horas de casados, Scott falleció.