'Carrusel de contratos' en Bogotá: Corte Suprema deja en firme condena a exdirectora del IDU, Liliana Pardo

La Corte Suprema de Justicia dejó en firme la condena de 19 años y nueve meses de prisión contra la exdirectora del IDU, Liliana Pardo, y la condena de tres años contra el excontralor de Bogotá, Miguel Ángel Moralesrussi, por hechos del denominado 'carrusel de la contratación'.

La Corte confirmó que ambos exfuncionarios hicieron parte del entramado de corrupción que se suscribió durante el mandato de Samuel Moreno, también condenado por esos hechos.

El magistrado Luis Antonio Hernández concluyó, en un fallo de más de 90 páginas, que no era procedente acoger los argumentos de ambos exfuncionarios que buscaban una rebaja sustancial en su condena.

El escándalo se desarrolló sobre la falle III de TransMilenio por la Avenida Boyacá, la calle 26 y las carreras 10ª y 7ª de Bogotá.

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A Liliana Pardo se le responsabilizó por una serie de irregularidades que se presentaron en la celebración de contratos de consultoría que tenían por objeto los estudios y diseños de las troncales para la selección de los contratistas que ejecutarían las obras.

“Dicha funcionaria, en calidad de jefe de la entidad, dio comienzo a la licitación para la ejecución de las obras de las Fase III, pese a que los estudios de factibilidad, conveniencia y diseños estaban incompletos”, se lee en la sentencia contra Pardo.

También señala que “esos insumos no permitían calcular la cantidad de obras a realizar, sus costos y proyecciones, de manera que las obras fueron adjudicadas con violación de los principios que orientan y definen la contratación pública”.

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Así mismo, que Pardo adoptó decisiones administrativas que flexibilizaron el manejo de los anticipos otorgados a los contratistas, lo cual facilitó la apropiación de los dineros en manos de éstos.

De Moralesrussi se dijo en la condena que pasó por alto la vigilancia como contralor de la adecuada inversión del patrimonio público en los procesos de selección de Fase III de Transmilenio, malla vial y valorización.

“En tres reuniones sostenidas con Guido Nule (una en el Hotel L’ettoile de esta ciudad y las otras dos en la oficina del excontralor), exigió a ese último la entrega de unos dineros correspondientes a una comisión de éxito del 2% del valor de la contratación de la malla vial para no entorpecer la adjudicación de esos contratos a los consorcios o uniones temporales en las que participaban empresas de los Nule”, se indica en la condena.