Más de 122.000 casos de restitución de tierras deberá asumir la nueva jurisdicción agraria

La discusión sobre la creación de una Corte Agraria ha dividido las tres ramas del poder en Colombia: mientras el Legislativo (Congreso) discute la iniciativa del Ejecutivo (Gobierno), que propone crear un nuevo tribunal que se encargue de los casos de disputa de tierras, la rama judicial (altas cortes) se opone de manera rotunda a este proyecto.

En una carta dirigida al presidente del Senado, Roy Barreras, el presidente de la Corte Suprema de Justicia y la presidenta de la Sala de Casación Civil de ese tribunal pidieron que la corporación tenga en cuenta que ya existe una jurisdicción que asume los casos agrarios en las zonas rurales.

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Explican que se trata de la justicia de restitución de tierras, regulada por una ley de 2011, en la que se reconoce que las altas cortes son el órgano de cierre encargado de dar solución definitiva. 

Según los magistrados, en estos tribunales los jueces han recibido 122.050 solicitudes de restitución de tierras, de las cuáles han resuelto 99.653, dando resultados satisfactorios a las comunidades que fueron desplazadas de sus territorios a causa de la violencia. 

La propuesta del Gobierno Nacional se basa en crear otra jurisdicción especializada para este tipo de casos, pero, según expertos en derecho, esto sería un problema porque en Colombia, ya existen demasiadas ramas de la justicia. 

"Lamentablemente se ha creado varias jurisdicciones más de las comúnmente conocidas. Este no debería ser el caso, pues sería sólo la jurisdicción para tribunales y jueces que sería una especialidad de la jurisdicción ordinaria", señaló Juan Manuel Charry, abogado constitucionalista. 

Una de las cortes involucradas es el Consejo de Estado cuando los casos están relacionados con algún proceso administrativo, por lo que para exmagistrados de este tribunal, es mejor que se busque unificar lo mejor de la justicia civil que imparte la Corte Suprema y la justicia contenciosa administrativa. 

"Es mucho más sensato que haya una hibridación que no una compartimentación, porque eso conduce a una cantidad de decisiones que son contradictorias y que finalmente no se podrían implementar", aseguró Marco Antonio Velilla, exmagistrado del Consejo de Estado.

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Pese a que en el Congreso se aprobó en quinto debate esta jurisdicción agraria como una sala mixta, los expertos consideran que este camino puede llegar a complicar la impartición de justicia agraria aunque los casos sigan su curso con un juez especializado, pues el traslado por los despachos puede causar que sólo se conozcan puntos subjetivos de los procesos.