Los que no cumplieron años

Un 29 de febrero, en el año 4 Antes de Cristo, Julio César impuso el calendario juliano con la intención de corregir errores astronómicos, pero luego fue cambiado por el calendario gregoriano, impuesto por el papa Gregorio y que no fue adoptado integralmente por todos los países.

No hay calendario matemáticamente perfecto, suele decirse, y eso explica que -dependiendo del que se haya adoptado- pueda incluso haber dos fechas distintas de nacimiento.

La Deutsche Welle aclara que un año es el tiempo que tarda la Tierra en dar la vuelta al Sol. Este período, que los astrónomos llaman el año trópico, no dura exactamente 365 días, sino en realidad 365 días, 5 horas, 48 minutos y 46 segundos o 365,2422 días.

“Es decir que existe un margen de error de casi seis horas en cada año normal, y los años bisiestos compensarían esos 0.2422 días. Si no tuviéramos años bisiestos, nuestras estaciones no estarían sincronizadas alrededor, con una diferencia de alrededor de 24 días, después de tan solo 100 años”, escribe en el medio alemán Zulfikar Abbany.

Y mientras todo conjura para que haya de nuevo bisiesto, que será en el  2024, este año muchas personalidades y seres comunes y corrientes y hasta compañeros de trabajo no pudieron celebrar el 29.

“Y cuando celebra”, le pregunto Edwin Moreno Melo, quien es uno de los conductores al servicio de RCN Radio y me dice que obligadamente el 28, aunque, si se puede, hasta el 30 y el 31. Debe ser la misma situación para el discjockey Julián Quintero Correa, quien también aparece en el listado oficial  de cumpleañeros de la cadena el 29 de febrero.

Ellos comparten esa extraña celebración con el poeta griego Giorgio Seferiades, Nobel de Literatura de 1963, a quien dos circunstancias particulares lo marcaron para siempre.

 “Giorgos Seferis nació en Esmirna –solar homérico por excelencia–, precisamente, el 29 de febrero de 1900, una característica, con la que el poeta solía bromear, diciendo que solo cumplía un año cada cuatro, a la que se unió otra, por la que perdió unos días más, cuando en 1923 Grecia adoptó finalmente el Calendario Gregoriano, pasando a ser su fecha de nacimiento el 13 de marzo”, escribió Clara Díaz Pascual en un texto titulado Diario de a Bordo.

Y hablando de libros, Manuel Drezner, en “El día a día de la literatura”, recuerda que un 29 de enero de 1897 “en la novela El hombre invisible de Hebert  George Wells se informa de la llegada a una posada de un misterioso extraño, vendado de pies a cabeza y cuya cara estaba oculta por las vendas”.

“El hombre invisible” es una novela de ciencia ficción originalmente publicada en entregas en la revista Pearson's Magazine, en 1897.

Y en la música, un 29 de febrero, pero de 1836, se estrena en la Opera de París, con música de Giácomo Meyerbeer, la opera Los Hugonotes, que era como se conocía para entonces a los protestantes en Francia.

Y un 29 de febrero de 1972 también se recuerda el nacimiento de Giochani Rossini, uno de los más importantes autores de ópera.

Pero también nacieron un 29 de febrero el gran científico John Philip Holland, el padre del  submarino moderno; el poeta y navegante británico Jhon Byron ; el director de cine estadounidense William Wellman, quien obtuvo un Oscar en el lejano 1928 y el escritor estadounidense de novelas de fantasía y ciencia ficción Tim Powers.

Se calcula que hay más de cinco millones de personas en el mundo que solo pueden celebrar su cumpleaños coincidiendo con el año bisiesto.