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María José Pizarro, hija de Carlos Pizarro
María José Pizarro, hija de Carlos Pizarro.
Foto: Colprensa

María José Pizarro, hija de Carlos Pizarro, máximo comandante del M-19 asesinado el 26 de abril de 1990, será nueva representante a la Cámara. A través de la denominada Lista de la Decencia, la misma que llevará al libretista Gustavo Bolívar al Senado, la hija de Pizarro llega al Congreso de la República.

“Queremos recuperar el ejercicio de la política conectada con la sociedad, que dé respuesta a sus necesidades, con creatividad, pedagogía y promoviendo la participación de la gente en las decisiones de política pública, de desarrollo territorial y demás decisiones del Estado. Defendemos el derecho de la gente a decidir qué Colombia necesitamos y deseamos. Ha llegado el momento de reapropiarnos de las instituciones del Estado para ponerlas al servicio de la ciudadanía y su bienestar”, señaló la nueva congresista.

“Trabajaremos por superar la imposición de un modelo en el que la gente del común debemos sufrir la inestabilidad y precariedad laboral, acostumbrándonos a no tener expectativa de una pensión digna, o soportando las inclemencias de un sistema que ni siquiera nos permite vivir la maternidad y la paternidad con garantías”, agregó.

Así se describe María José Pizarro

Lideresa política, activista por la paz y la memoria. He dedicado mi trabajo y esfuerzo a recuperar la memoria viva del país y en particular la historia de mi padre, Carlos Pizarro, máximo comandante del movimiento guerrillero M-19, asesinado tras firmar la paz en 1990. Mis estudios de artes plásticas me impulsaron a investigar y realizar una curaduría de él, que se ha convertido en exposiciones, documentales, películas y libros.

Desde la Secretaría de Cultura de Bogotá (2011-2013) y el Centro Nacional de Memoria Histórica (2013-2017), he trabajado con comunidades en el diseño, implementación y coordinación de programas para la participación, los derechos de las víctimas y las políticas públicas de reparación y memoria; las acciones conmemorativas y la construcción de memoria.

Soy víctima del conflicto colombiano, desde muy pequeña, viví en el exilio. Estuve en Ecuador, Francia y España. Desde Barcelona me convertí en una de las voces del activismo por la memoria con la diáspora colombiana, y desde mi regreso al país he dedicado mi trabajo a los derechos de las víctimas. Nací en Bogotá en 1978 y tengo dos hijas Maya (17 años) y Aluna (5 años).

Fui convocada para encabezar la #LaListaDeLaDecencia a la Cámara de Representantes en la coalición de Gustavo Petro (Colombia Humana), Clara López (Todos Somos Colombia), el Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS), la Unión Patriótica (UP) y la Alianza Social Independiente (ASI). Le apuesto colectivamente a la defensa de la vida digna, la paz y a la exigencia del cumplimiento de las leyes y políticas públicas que favorecen todo derecho humano fundamental y en particular, los derechos de las mujeres.

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