Al menos 906.000 personas migraron de ciudades y del campo, el año anterior

Entre los meses de julio y noviembre del año anterior, 906.000 personas migraron de las ciudades al campo y de los campos a las ciudades. Uno de estos casos es el de Rosa y su esposo José, quienes son mayores de 70 años, y por más de 60 han vivido en Bogotá.

“Mi mamá es una persona que, aunque ya tiene 80 años toma sus decisiones, hace sus compras a su gusto, y mi papá, es igual”, comenta su hija Ángela, quien sigue contando que esta pareja a pesar de su amor por Bogotá, decidió salir de la ciudad y vivir en la zona rural de un municipio ubicado a tres horas. Esto, con el fin de estar un poco más protegidos de la pandemia.

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“¿Ha sido ventajoso? Sí, me parece que ha sido una ventaja, ellos han cambiado sus hábitos de alguna forma, tienen otros intereses aquí. El desafío es mantenerlos en este ambiente tan saludable, mantenerlos aquí mientras dure esta pandemia”, agregó.  

Así como esta pareja, otras más han decidido alejarse de las ciudades y trasladarse a los campos, o pequeñas poblaciones. Entre los meses de julio y noviembre del año anterior, 598.000 personas salieron de las ciudades al campo.

Marcela, quien vive en Anolaima (Cundinamarca) dice que es evidente la presencia de nuevos visitantes en su municipio: “He visto cómo el municipio se ha venido llenando de personas de la ciudad que se han venido a vivir al campo, y esas decisiones las han tomado a raíz de la pandemia. Muchos están haciendo teletrabajo desde sus fincas, y otros han iniciado proyectos productivos”.

Fabián Díaz, experto en salud pública y docente de maestría en esta área de la universidad EAN, dijo que este comportamiento de migración es natural ante las circunstancias actuales y que, bajo el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad, permite la reactivación de las economías rurales.

“Es un comportamiento normal porque las personas al haber sufrido en las casas, se han dado cuenta que, para mantener la mente un poco más activas, estas zonas de ruralidades les beneficia. Resulta adecuado también porque al final lo que uno está viendo es que las personas se quieren aislar y eso muestra un grado de autocuidado”, precisó.

Así como hay personas que migran de las ciudades al campo, también hay quienes han salido de los campos hacia las ciudades durante el tiempo de pandemia. De acuerdo con el Dane, unas 308.000 personas han realizado este tipo de migración.

El profesor de la EAN Fabián Díaz indicó que este es un fenómeno que desde hace mucho tiempo se presenta por situaciones, entre otras, como el conflicto armado, la falta de desarrollo o la búsqueda de mejor educación.

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“Sin embargo, este fenómeno en la pandemia sigue ocurriendo por la poca afluencia de turistas y de movilidad ocasionada por el covid-19. En ese orden de ideas, es lógico que muchas personas migren del campo a las ciudades en estos tiempos”, indicó.

De acuerdo con el Dane, la migración de 2020 ocurrida de las ciudades al campo y del campo a las ciudades corresponde a 20.000 personas más que en el 2019.

Dentro de la población que migró el año anterior de sus lugares de residencia hay 459.000 frente 447.000 hombres. Entre 25 y 54 años tiene la población que en su mayoría migró durante ese periodo.