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Andrés Felipe Arias, exministro de Agricultura
Andrés Felipe Arias, exministro de Agricultura
Colprensa

Permanecer privado de su libertad por lo menos hasta el año 2025 es el panorama que le esperaría a Andrés Felipe Arias, luego de su extradición el pasado 12 de julio a Colombia, desde Estados Unidos.

Especialistas creen que las estrategias jurídicas para el ex ministro condenado por dos delitos, se centrarían en buscar una redención de la pena por buen comportamiento y estudios.

Entre el estado de reclusión en el que hoy permanece Andrés Felipe Arias y los momentos en los que el ex funcionario se defendía de las denuncias en su contra por irregularidades en el programa de Subsidios denominado Agro Ingreso Seguro, ha transcurrido alrededor de una década.

En medio de investigaciones que concluyeron instancias como la Fiscalía y la Procuraduría en cabeza, entonces, de Vivianne Morales y Alejandro Ordoñez, se demostró lo contrario de los argumentos del hoy condenado.

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Finalmente, cuando la magistrada María del Rosario González leyó la sentencia en contra de Arias el 17 de julio de 2014, ni el ex ministro ni su defensa se encontraban en el recinto de la Corte Suprema de Justicia.

Regreso por pedido de las autoridades para que cumpla la condena

Luego de permanecer cuatro años en Estados Unidos, el pasado 12 de julio, Andrés Felipe Arias fue extraditado hacia Colombia. Diego Castillo Rincón, abogado especialista, se ha dedicado a estudiar el caso del ex ministro y concluye que por el momento “al menos en el corto plazo, lo único que le espera es empezar a pagar la condena que le impuso la Corte Suprema de Justicia a 209 meses y ocho días de prisión”.

Una vez proferida una condena no existen posibilidades para una rebaja del tiempo en prisión. Sin embargo, existe un derecho para lo que se denomina redención de la pena por factores como estudio, trabajo o enseñanza.

Esta sería una de las posibilidades de Arias para reducir el tiempo que deberá permanecer recluido teniendo en cuenta además  que ya ha estado privado de su libertad en Colombia y en Estados Unidos, un total de cuatro años.

 

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[AUDIO] ¿Qué le espera a Andrés Felipe Arias en materia judicial? / Informe

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Buscar un cupo en la JEP

Se ha planteado incluso que Arias podría, luego de lograr relacionar su caso como un hecho dentro del marco del conflicto armado, acogerse a la JEP y de esa forma obtener lo que se denomina libertad transitoria condicionada y anticipada y de esa forma quedar libre.

Sin embargo, sostiene el abogado Castillo, hay un hecho que no permitiría que fuera aceptado en la justicia transicional porque “el marco jurídico de la JEP dice que estos delitos no debieron haber tenido como principal propósito el de enriquecerse o beneficiarse y, el caso de Arias, es evidente que era el principal porque se trata de un peculado por apropiación en favor de terceros”.

La “ley Arias”?

Una modificación constitucional para que Andrés Felipe Arias tenga una segunda instancia, es decir que se genere una retroactividad para este derecho consagrado en convenciones internacionales a las que ha adherido Colombia, no solo implica las dificultades propias de tener mayorías en el Congreso para su aprobación, sino además la revisión por parte de la Corte Constitucional.

Aun pasando estas pruebas, Arias se enfrentaría en una segunda instancia a la misma Corte Suprema de Justicia que lo condenó en 2014.

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“Ante la contundencia del fallo, que está vigente contra Arias, es más probable que una eventual segunda instancia confirme una sentencia condenatoria en lugar de cambiar el sentido del fallo; es decir, que es más probable que lo declaren nuevamente culpable que inocente”, puntualiza el abogado Castillo.

El Inpec es la autoridad que por el momento, teniendo en cuenta que Andrés Felipe Arias fue juzgado como aforado y en condición de ex ministro, puede argumentar el perfil del condenado para garantizar su integridad.

Situación que puede representar que la condena se cumpla, por lo menos seis años más. Es decir, el tiempo en el que la defensa pudiera pedir libertad condicional por buen comportamiento en la Escuela de Caballería del Ejército o en otro sitio diferente a una cárcel como La Picota.

Fuente

RCN Radio

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