Brigadistas y misiones médicas: testimonios en medio de la furia de los disturbios

La Personería de Bogotá dio a conocer en un reciente balance que hay alrededor de 1.055 personas que han resultado heridas y cinco muertas, en medio de las manifestaciones del paro nacional en Bogotá, todas estás personas y tal vez más son atendidos por brigadistas y misiones medicas.

Luisa Gómez, estudiante de la Universidad Nacional y brigadista en medio del paro en Bogotá, aseguró que "lo más doloroso son las lesiones oculares".

"Las personas que reciben estas lesiones presentan el temor de no poder ver y de perder su ojo e, incluso, morir. Para las personas con este tipo de lesiones o con traumas craneoencefálicos la pregunta más frecuente que me hacen es '¿me voy a morir?'", dijo Gómez.

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Lo más difícil, según los profesionales de la salud que atienden heridos en las protestas, es tratar de llegar a un hospital con el paciente vivo y completo, para poder intervenirlo y salvar su vida o atenderlos para evitar que pierdan alguna extremidad, como sus ojos, dedos e incluso evitar que terminen inmóviles o en sillas de ruedas.

"Siempre hay algo que nos marca. Hemos tenido que atender personas que pierden sus ojos, que pierden la vida o, incluso, que su pronostico de salud no sea el mejor", dijo Camilo Valderrama brigadista de la Misión Medica en Bogotá.

Añadió que "he atendido menores de edad; personalmente tuve que atender una chica de trece años que perdió un dedo y tuvo heridas impresionantes".

Uno de los fallecimientos en medio de las protestas que más conmocionó a la brigada de salud que la asistió fue el caso de Cristian David Castillo, el joven de 22 años que murió luego de recibir un golpe con un objeto contundente en la cabeza.

Confirmaron su deceso cuando llegó la ambulancia, en medio del caos, los gritos, el pánico y la desesperación porque falleció en el lugar de los hechos.

"¡Ayúdenlo! ¡Ayuda! Den espacio (...) ya no tiene pulso, no tiene signos vitales (y) está sangrando mucho y le dieron en la cabeza", se escuchaban las voces de brigadistas y testigos de los hechos en Suba, donde ocurrió el caso de Cristian Castillo. 

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El caso de una madre que perdió su bebé en una ambulancia en medio de los bloqueos en Tocancipá conmocionó al país, que emocionalmente son duros para quienes hacen parte de las misiones medicas, como lo manifestó la brigadista Luisa Gómez.

"Los casos más impactantes son los casos de fracturas, golpes en el tórax, los más puntuales son los casos de niñas, bebés y adultos mayores y gestantes que son afectados por los gases, que a veces reciben sensaciones de ahogo y de no poder respirar entre otras", dijo Gómez.

En medio de las diferencias políticas, no  importa si es manifestante o miembro de la fuerza pública, si es de derecha o izquierda, su misión es hacer lo posible para salvar vidas.