Con el sol, familias indígenas en La Guajira esperan obtener agua potable
La principal forma en la que consiguen agua los habitantes de la región es comprándola en carro tanques.
Profesores universitarios diseñaron un dispositivo que, a través del uso de la energía solar, es capaz de convertir en potable el agua salina. El proyecto tiene como objetivo beneficiar a las familias wayúu de una zona rural del municipio de Manaure, en La Guajira.
En solo tres de los quince municipios ubicados en La Guajira, los habitantes pueden acceder al servicio de agua potable. Así se desprende de un diagnóstico hecho por el Ministerio de Vivienda en 2019.
Entre los municipios en los que los habitantes no cuentan con sistemas de acueducto está Manaure. Lilian De Luque Bruges, funcionaria de la administración local, explica que “en las zonas que van hacia el lado del mar que son las que están entre Manaure y El Pájaro kilómetro 15, hay que hacerlos muy profundos (pozos) para conseguir agua dulce porque casi siempre sale salina”.
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Alrededor del 57% de la población en Manaure vive en las zonas rurales, las mismas áreas en las que conseguir agua representa “caminar horas para conseguir agua a veces la toman de pozos artesanales o de jabueyes que no es de buena calidad y por eso los niños se enferman”, añade la funcionaria.
[AUDIO] Acceso al agua potable en La Guajira
Manuel Mejía, doctor en Ingeniería Mecánica, hace parte de un grupo de cinco investigadores de la Universidad Central creadores de un dispositivo que, usando la energía solar, logra separar la sal del agua y convertirla en potable.
Explica que la tecnología implementada y el principio físico usado “requieren de una gran cantidad de energía solar para que el rendimiento sea adecuado. En principio, las zonas áridas y cerca del mar son las ideales pero, por ejemplo, si una comunidad tiene como fuente de agua un pozo profundo con concentraciones de sales altas y adicional tiene un clima con temperaturas por encima de 30 grados, pues podría pensarse en instalar este dispositivo”.
El proyecto, destacado entre varios de otros países en un concurso denominado “ingeniería para el cambio”, logró que la propia comunidad lo adoptara dentro de su visión indígena cercana a lo que los wayúu denominan como los guardianes del agua. La idea es poder construir varios desalinizadores y distribuirlos entre las rancherías de Manaure.
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Exceptuando el panel solar que ya está construido el dispositivo se puede armar con elementos que se consiguen muy fácilmente en ferreterías. Una vez se inicie el proceso de construcción se pasará a la fase de entrenamiento para que las propias familias puedan obtener hasta 8 litros de agua potable diariamente.
“Todo lo que se refiera a agua potable para la comunidad de Manaure es esencial”, puntualiza De Luque Bruges.
En Colombia, cerca del 73% de la población rural no posee acueductos. De los recursos que obtengan para financiar la construcción de los dispositivos desalinizadores depende la rapidez de su masificación entre la comunidad de Manaure como un piloto para replicar en otras zonas con dificultades de acceso al agua potable.
RCN Radio
