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Sacerdote en Cundinamarca oficia misa en patrulla de policía
Sacerdote en Cundinamarca oficia misa en patrulla de policía
RCN Radio

Juan Felipe nos espera a las 5:40 de la tarde con la iglesia principal de Funza a sus espaldas, una iglesia en cuarentena. 

Vestido de chaqueta y pantalón de lino, entra en una camioneta de la policía y pronto llega a una calle cualquiera. 

Allí se baja de la cabina de la camioneta. Instala una mesa en el platón de la camioneta y de su maleta saca decenas de cosas incluyendo la indumentaria sacerdotal. Es el padre Juan Felipe Cucunubo, párroco de la iglesia de Santiago Apostol; se ajusta el tapabocas y empieza el perifoneo.

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[VIDEO] Así fue una misa vista desde las ventanas de la comunidad

“A la comunidad de este sector, a todos los vecinos, los invitamos a participar hoy de la Santa Eucaristía”, retumba un sistema de sonido provisto por la Policía de Cundinamarca.

“Para que desde sus ventanas, desde sus puertas, puedan disponerse, puedan acompañarnos en este tiempo de pascua”, avisa.

Un poco antes de iniciar su misa en una calle sin gente, habla con nosotros para contarnos que “hemos venido acá a visitar este sector, vamos a celebrar desde este punto para las personas que viven en estos conjuntos y con esto, queremos visitarlos y dar un mensaje de esperanza ante esta situación”.

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La idea fue del capitán Carlos Moreno, comandante de la Policía del municipio. Muchos sacerdotes en el país hoy transmiten sus liturgias desde los templos vacíos pero, en el caso del padre Cucunubo, él intentó llevar el templo a u comunidad al menos lo más importante de él.

Y las personas como Milena Álvez, lo saludan desde la lejanía de su cuarentena. “Para nosotros es un momento muy especial, un momento espiritual, nos ayuda a confortarnos en esta situación”, dice, acompañada de una de sus hijas que intenta prender un velón blanco.

Ten piedad de mí, oh señor ten piedad...”, se escucha en el centro de ese auditorio urbano mientras dentro de los apartamentos ocurre la iluminación: se encienden decenas y luego cientos de velas que convierten al barrio en una constelación de pequeñas llamas, dando fe de la presencia silenciosa de fieles detrás de los vidrios. Incluso el comandante del Distrito, Mayor Carlos Rodríguez, se conmueve.

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Y es precisamente el Distrito de la Policía de Cundinamarca el que apoya y realiza el acompañamiento a estas actividades, a la vez masivas y solitarias.

Es una voz de aliciente que se les trae a las personas que están en este momento cumpliendo la cuarentena, es un acercamiento que se ha hecho, en este caso con la iglesia católica y estamos dando una voz de esperanza”, dijo el oficial.

Tras la bendición final el vacío de la calle oscura se llena con los gritos de gracias y los aplausos. 

Ya es de noche. pero las velas siguen encendidas hoy en un barrio cualquiera de Funza la oscuridad cedió el paso.

Fuente

RCN Radio

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