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Mujeres y equidad de género
Mujeres. Imagen de referencia.
AFP

Una de las prioridades del nuevo gobierno será la búsqueda de la equidad de las mujeres en todos los sectores de la vida pública. El nombramiento de mujeres en la mitad del gabinete ministerial es una de las acciones recientes en la materia pero no demuestra la realidad nacional en otros escenarios.  

Blanca Cardona, Directora de Gobernabilidad Democrática del Programa de las Naciones, sostiene que “las mujeres en Colombia han venido incrementando su participación en política de una manera relativamente lenta, pues el país todavía no se encuentra en un escenario de paridad, es decir de tener listas conformadas en un 50% por mujeres y en un 50% por hombres. En este momento estamos en un 30%, cosa que nos deja atrás en comparación con el resto de la región de América Latina". 

Además, la directora resalta que “el porcentaje de mujeres actualmente en el Senado pasó de ese 7% en 1991 al 23%, y en el caso de la Cámara del 8 al 18%”.  

En materia de normatividad la directora del departamento de Ciencia Política de la Universidad de Los Andes, Laura Wills, argumenta que “luego de la Constitución de 1991 tomó un tiempo para que se implementaran medidas y normas que le permitieran a las mujeres tener poder político dentro de las instituciones del Estado”. 

Según la politóloga, las normas que han marcado este avance se dieron “en el año 2000 con la ley 581, donde se establece una cuota del 30% de mujeres en cargos de decisión de la administración pública y las reformas legislativas que se han hecho más recientemente, empezando por el acto legislativo número 1 del 2009, pues aquí se decide que debería haber equidad de género al interior de las organizaciones y de los movimientos”.  

Para Diana Osorio y Ángela Rodríguez, promotoras del estudio 'No es Normal' del Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria en Colombia, una de las razones de este fenómeno es la violencia que muchas de las funcionarias experimentan.  

Diana Osorio menciona que "6 de cada 10 mujeres que participan en política son víctimas de violencia, siendo el maltrato psicológico el más frecuente”. 

Por su parte, Ángela Rodríguez explica que "en la política hay una percepción paradójica porque todavía se considera que estos escenarios son de los hombres y que el interés por lo público es de los hombres, pero al mismo tiempo tenemos medidas como las que se promueven en la ley 1475 de 2011, conocida como la cuota, que dice que hay que incentivar a las mujeres a participar en política". 

Respecto a los estereotipos que sufren las funcionarias, Ángela Anzola, secretaria de la Mujer de Bogotá, expone que muchas veces las mujeres se tienen que enfrentar a varios estereotipos.  

"A veces encontramos en la sociedad actitudes negativas cuando una mujer adquiere estos roles de liderazgo porque la tendencia es a decir 'esa mujer es muy fuerte, es gritona, es impositiva'. Siempre estamos jugando con el tema de que somos las mujeres las únicas quienes cuidamos a todo el resto, entonces ahí caemos en prejuicios donde se nos hace difícil ocupar esas posiciones de liderazgo que podemos y debemos llegar a tener las mujeres" dice Anzola.  

Entonces, aunque es evidente el progreso todavía queda una brecha importante por saldar en cuanto a las intenciones de las mujeres de ejercer un cargo público y la disposición de la sociedad colombiana de aceptarlas y verse representada en ellas.  

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Fuente

RCN Radio

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