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Enfermedad niños
Enfermedad niños
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Hace unos días se conoció el caso de Florence Swaffield, una niña inglesa de 3 años, que fue diagnosticada con la enfermedad de Batten tipo 2. La noticia la dio a conocer la madre de la menor, quien dijo que “estoy perdiendo a mi hija por culpa de una clase de demencia infantil”.  

¿Qué es Batten? 

Es una condición genética que por su impacto en las células del cerebro causa repentinamente que el niño experimente convulsiones y pierda habilidades que ya había desarrollado, como hablar y caminar.  

Los niños nacen con un desarrollo normal, pero con el paso del tiempo comienza a notarse un deterioro de sus capacidades. Al inicio presentan pérdida del leguaje, pérdida de habilidades en el movimiento y crisis epiléptica, progresivamente se van deteriorando hasta fallecer. 

“La enfermedad de Batten es una de esas condiciones hereditarias poco frecuentes y fatales que afectan el sistema nervioso central generando que el niño se deteriore lentamente”, explicó la doctora Laura Guio, neuropediatra-epileptóloga y líder del programa de epileptología y del laboratorio de Epilepsia y Sueño del Hospital de la Misericordia (HOMI).

El panorama en Colombia 

En el país se han diagnosticado aproximadamente 17 niños con la enfermedad de Batten, sin embargo, el desconocimiento de los síntomas y el difícil acceso a especialistas en algunas zonas genera un subregistro de la enfermedad en el territorio nacional. 

Cuando la enfermedad de Batten se confunde con epilepsia 

Uno de los diagnósticos más comunes con los que se confunde la enfermedad de batten es la epilepsia.  

Para la doctora Guio es fundamental entender que “cuando alguien tiene una epilepsia simple se ve enfrentada a una serie de crisis convulsivas que requieren tratamiento. En estos casos usualmente el paciente recibe tratamiento y su condición por lo general presenta una mejoría”. 

En el caso de la enfermedad de Batten la doctora Guio señaló que “cuando las crisis epilépticas van acompañadas con cambios repentinos de comportamiento, se desarrollan problemas para el aprendizaje que antes no tenía, la capacidad para poner atención se deteriora y hay modificaciones en su personalidad, entonces no puede considerarse como una epilepsia simple.  Es probable que el niño presente alguna enfermedad genética, dentro de las cuales puede estar la enfermedad de Batten”. 

Según los expertos es fundamental que padres y cuidadores consulten de manera urgente a su médico de cabecera e idealmente a neuropediatría para que sea valorado y se le ordene los estudios adicionales que se requieran para el diagnóstico.  

Diagnóstico y tratamiento 

En la enfermedad de Batten por lo general los síntomas inician a los tres años. “Vemos que en los primeros años de vida el niño tiene un desarrollo aparentemente normal o ligeramente retrasado y sobre los tres años empiezan a notarse dificultades del lenguaje y equilibrio. También comienza a presentarse las crisis de epilepsia que se perciben como unos saltos en el cuerpo del niño, medicamente llamado ‘mioclonias’. Lo complejo del diagnóstico en la CLN2, es que también puede llegar a presentarse en niños mayores de 7 años, y por esta importante razón, tanto la familia como el médico, deben estar muy atentos a la pérdida de habilidades ya adquiridas, estos son los primeros “signos de alerta” para un diagnóstico temprano”, expresó la doctora Laura Guio. 

Actualmente existen tratamientos que pueden contribuir a mejorar la calidad de vida de estos niños, y, por ende, también la de sus familias. Es fundamental el diagnóstico temprano y la atención médica integral desde que aparecen los primeros síntomas. 

De acuerdo con Martha Herrera, directora de la Fundación Colombiana para Enfermedades Huérfanas (FUNCOLEHF), “hemos venido trabajando de manera consistente para que en el país tengamos la mejor ruta de diagnóstico y tratamiento para los pacientes y sus familias. Sabemos que la enfermedad de Batten es una condición difícil de abordar, pero también somos conscientes que en la actualidad existe tratamiento y diferentes recursos que pueden mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes y sus familias. Nuestro propósito es apoyarlos en el desafío de esta patología”.   

En el país la ruta de diagnóstico es lenta. La doctora Guio manifestó que el problema de los tiempos de diagnóstico varía significativamente, según la zona de Colombia, ya que las áreas rurales se ven más afectadas debido a las demoras en la consecución de citas con especialistas.  

“En general es demorado, no estamos acostumbrados a ver este tipo de enfermedades tan agresivas y que deterioran tan rápidamente a los niños. Muchas personas no saben que existe y si no las conocemos, no las buscamos, y por ende nos enfrentamos a pacientes que necesitan el diagnóstico, pero tardan en llegar a él”, añadió Guio.  

Fuente

Sistema Integrado Digital

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